La dilatación toracoabdominal a expensas de la luz falsa supone la principal complicación a largo plazo de la disección aórtica, afectando hasta un 40% de los pacientes pese a un tratamiento médico adecuado 1-4. De la misma manera, se estima que un 20% de los aneurismas toracoabdominales son secundarios a una disección crónica.
Es una entidad clínica con elevada morbimortalidad perioperatoria, que incluye complicaciones cardiopulmonares, insuficiencia renal con necesidad de hemodiálisis, isquemia visceral, paraparesis y paraplejia5, siendo estas más frecuentes ante reparaciones más extensas de la aorta (reparaciones tipo II de la clasificación de Crawford) 5,6. Presentamos un caso clínico con un aneurisma de aorta toracoabdominal tipo II secundario a una disección aórtica con afectación iliaca durante el seguimiento.
Deja una respuesta